Crianza Saludable

En estas vacaciones de medio año, muchas familias disfrutarán de días llenos de emoción, unión y sobre todo de experiencias inolvidables. Una de esas bellas experiencias es el viajar al lado de tus pequeños. Para disfrutar al máximo de estos días es necesario estar preparados, pero sin llegar a estresarte. A continuación, comparto unos consejos que ayudarán a que esta gran experiencia sea del todo agradable. Recuerda siempre portar el DNI de tus hijos, es un requisito indispensable para poder viajar, dentro o fuera del país. No viajes con un equipaje de mano demasiado pesado; recuerda que al tener niños, ya sean pequeños o mayores de 3 años, siempre te mantendrán con las manos ocupadas. Cuando llevo a mis hijas de paseo, suelo darles una mochila pequeña con cosas necesarias como: juguetes (evitar los que tienen piezas pequeñas, electrónicos o demasiado grandes), pañales (cuando eran pequeñas, siempre llevaban sus pañales dentro de sus mochilas o carteras), un cambio completo de r

Somos criaturas musicales de forma innata   desde  lo más profundo de nuestra naturaleza.   (Stefan Koelsch) Muchas madres amamos la música y solemos exponer a nuestros pequeños a nuestros gustos musicales; bailamos y cantamos con ellos, aún sin saber, realmente, los beneficios que la música tiene para ellos. Este artículo, nos ayudará a comprender los beneficios de la música en el desarrollo de nuestros pequeños. https://www.youtube.com/watch?v=lPtiMRu6D7A Gardner (autor de la teoría de las “Inteligencias Múltiples”) afirmaba que “la inteligencia musical es una manera de pensar con el sonido”, es decir, que es un lenguaje universal, pues es compartido por la gente de todo el mundo. Por su parte, las investigaciones científicas, también han demostrado que existe un efecto positivo de la música en los niños: En 1975 se tocó canciones Mozart en una sala de neonatología en un hospital de Estados Unidos a un grupo de niños prematuros y se comprobó que aumentaron de peso con más

Como padres de niños pequeños, sabemos por experiencia, que a los niños de entre dos y tres años les cuesta “obedecer”, se resisten a las normas que les imponen los padres e inician los terribles “berrinches” cuando los padres no comprenden lo que piden o no acceden a sus deseos. Me apena corroborar en la calle, que estas actitudes para la gran mayoría de padres y cuidadores, suelen ser vistas como anormales, no sabiendo cómo atender a esta etapa evolutiva en la que el niño está adquiriendo la autonomía, por tanto, la oposición aparece como vía de consolidación de la identidad, pero son los padres y cuidadores los verdaderos responsables de ayudar a regular estas conductas del niño, para que aprenda a mostrar conductas, según las exigencias propias de la edad y de los diversos lugares y personas con quienes interactúa. Muchos padres suelen preguntarme, en las atenciones psicológicas que brindo, ¿cómo pueden erradicar esas malacrianzas? ¿Cuáles son los pasos a seguir, para que el n